martes, 5 de abril de 2011

.

No decía palabras,
acercaba tan sólo un cuerpo interrogante,
porque ignoraba que el deseo es una pregunta
cuya respuesta no existe,
una hoja cuya rama no existe,
un mundo cuyo cielo no existe.

.

Como si hubiera salido de un cuento que nunca pude encontrar, crecí pensando que no iba a crecer más.
 En un jardín de cerezos espera sentada un dia más.
¿Dónde vas pequeña? ¿A dónde quieres llegar?